Flores y colores, aromas y sonidos de agua con conversaciones de fondo, música y baile sin olvidar el sonido de los pasos al caminar y personas decorando las casas. Sus casas.
Así son los patios de Córdoba, una fiesta tan importante para la ciudad que, de ser Córdoba un país, los patios serían su fiesta nacional.
EL CONCURSO DE PATIOS
¿Qué tiene un concurso que levanta tantas pasiones entre la gente?; ¿Por qué algo tan sencillo como las plantas y las flores puede mover a toda una ciudad para hacer algo así? Decorar las entradas de las casas para ofrecerlas a la gente que quiera entrar a verlas, se bañe los ojos con el espectáculo y luego siga su camino como viajante que vaga por las calles sin un rumbo fijo.
En la mente de muchos puede sonar descabellado y casi un poema antiguo, pero es algo real que se hace año tras año desde 1921 y que se ganó la simpatía de la gente a partir de 1933. No cometáis el error de confundirlo con algo de la actualidad, pues esta fiesta cuenta con casi un siglo de antigüedad.
Además, todo apunta a que seguirá celebrándose mucho tiempo, pues se ha ganado el amor de todos y sigue conquistando los corazones de quienes la ven.
¿CÓMO ES VIVIR LA FIESTA DE LOS PATIOS?
Para convenceros de lo que hablo, no tenéis más que cerrar los ojos e imaginar un patio, preferentemente de paredes blancas. No es preciso que sea demasiado grande, pero sí lo es que visualicen macetas colgando de sus paredes, en filas perfectas o de forma aleatoria. Esas macetas van repletas de plantas de colores y suaves fragancias que golpean nuestras fosas nasales, pero no nos hacen daño. No es como oler una colonia intensa, sino una fragancia hecha a base de muchas otras, de forma que queda como resultado un perfume fresco y lleno de matices. Es el sol que empieza a calentar después del invierno pero que aún no asfixia son sus rayos, la brisa que sopla tranquila, contra la que ya no hace falta usar abrigos gruesos y el ambiente, movido y alegre sin llegar a colapsar.
CONCLUSIÓN
Ese es el espíritu de la primavera, agradable y sosegado, igual al espíritu de Córdoba en la festividad de los patios de mayo. Una fiesta para quienes aman la primavera.
Así es que venid a enamoraros de esta ciudad y sus patios, pero hacedlo con la mayor comodidad y pensando en disfrutar a fondo de todas las maravillas que ofrece este lugar.
Es por eso que os animamos a reservar ya en nuestro restaurante de Patio Romano , cerca de la mezquita de Córdoba y dejaos embriagar por la mejor comida de la ciudad, elaborada de forma artesanal por los mejores profesionales. Os aseguramos que la velada será perfecta en el restaurante en la judería Córdoba, y servirá de colofón a esos días en la ciudad.
Os esperamos con los brazos abiertos.